Tarta rellena de crema, trufa y nata
Una tarta exquisita, con tres rellenos distintos, bañada en almibar, jugosa, de las que siempre te quedas con ganas de comer mas¡¡¡¡¡¡¡¡¡ seguro que te va a encantar.
PARA EL BIZCOCHO
9 huevos
135 g. de maicena
75 g. de harina
400 g. de azúcar
Pizca de sal
1 molde de 24 cm,
PARA EL ALMÍBAR
150 gr de azúcar
150 ml de agua
50 ml de Kirsch
PARA LA NATA Y LA TRUFA
1 l. de crema para montar
4 sobres de estabilizantes
8 cucharadas de azúcar glass
2 cucharadas de cacao puro
PARA LA CREMA DE VAINILLA
600 ml de leche
50 gr de maicena
50 gr de mantequilla (Opcional)
4 yemas
130 gr de azúcar
130 gr de azúcar
1 vaina de vainilla
PARA LA COBERTURA DE YEMA
4 yemas
80 gr de azúcar
4 cucharadas de agua
Flores de azúcar para decorar
Encender el horno a 170º con una brocha untar el molde con mantequilla, y enharinar, sacudiendo la harina sobrante.
Batir los huevos y el azúcar, hasta que estén muy cremosos, y tripliquen su volumen.
Cuando están bien batidos, nos van hacer montañitas, que se van a mantener, la mantequillas la metemos unos segundos en el micro.
Tamizamos el harina y la maicena juntas, se lo añadimos al batido de huevos con movimientos envolventes, mezclamos para que no queden grumos.
Echamos a la masa, la mantequilla liquida y fría, con cuidado mezclamos bien
Echamos la masa, en el molde, llevamos al horno, y en unos 30 minutos se nos cuece, pinchar antes de sacarlo del horno para ver si esta cocido, los bizcochos para tartas mejor hacerlos el día anterior.
Preparamos la crema, una crema que la vi en el blog Javi recetas y la verdad que sale muy rica, separamos un poco de leche, y desleímos la maicena en ella para que no queden grumos.
La vaina de vainilla, la abrimos al medio y sacamos las semillas, echamos vaina y semillas a la leche, llevamos al fuego cuando rompa a hervir, retiramos y dejamos emulsionar.
En un bol ponemos las yemas con el azúcar, removemos para que se integren bien.
La leche ya estará templada, la colamos y la vamos añadimos la maicena disuelta en la leche fría.
Llevamos al fuego y sin dejar de remover, hasta que espese un poco, retiramos del fuego.
Le vamos añadiendo las yemas sin parar de remover, para que no cuajen y volvemos a poner al fuego, hasta que están lo suficiente espesas, pero cuidado que se pegan muy fácilmente.
Le añadimos fuera del fuego la mantequilla, es opcional, le va a dar cremosidad a la crema.
Montamos, la nata le vamos añadiendo los sobres de estabilizantes, y cuando este casi montada le añadimos el azúcar a cucharadas.
Separamos como 250 gr de nata montadas y le añadimos el cacao, mezclamos y ya tenemos la trufa, le puedes añadir un poquito de licor, si no hay niños.
Preparamos un almíbar con 150 g. de azúcar, y 150 ml. de agua, dejamos cocer 5 minutos a fuego suave y le añadimos 50 ml de Kirsch (licor de cerezas)
Mojamos el disco base, con el almíbar casi frío, ponemos una capa de la nata con cacao (trufa)
Cubrimos la trufa con otro disto de bizcocho, y le también le mojamos un poco con el almíbar, ponemos una capa de nata montada.
Cubrimos la nata con otro disco, mojamos con el almíbar, y le ponemos una capa de crema de vainilla.
Preparamos la yema, hacemos un almíbar con 80 g. de azúcar y 4 cucharadas de agua, lo dejamos cocer a fuego lento 10 minutos, (a 120º C.) lo dejamos enfriar un poco .
Con 4 yemas limpias de clara, las colamos y les añadimos el almíbar despacio removiendo rápido las yemas.
Las llevamos al fuego, yo en la vitroceramica, de inducción la pongo al 3 o 4 y sin parar de remover, hasta que espese un poco, suelo hacerlo en una sartén antiadherente, que es donde menos se me pega, en la TH no me gusta porque la yemas, salen con mucha espuma y blanquecinas, y quedan mas bonita para cubrir los pasteles, haciéndola al fuego.
Tapamos con el último disco, cubrimos con la yema, y decoramos la tarta con la nata y la trufa, una tarta muy jugosa y rica.
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