La Cocina De adita

Un postre de cielo, son suaves, con una textura divina, son faciles de cocinar, aunque a veces le tengamos un poco de miedo, una vez que lo haces ya no paras de hacerlo.

Ingredientes
6 yema
1 huevo
250 gr de azúcar
125 ml de agua
Para caramelizar
120 gr de azúcar
1 cucharada de agua

Echamos agua en la bandeja del horno, y le encendemos a 170º C con aire, y si es convencional a 180º C

Hacemos el caramelo, o usamos del que viene preparado, a mi me gusta mas el casero, en una sartén echamos el azúcar con la cuchara de agua, ponemos al fuego.

Cuando tome un poco de color dorado, bañamos el molde, o los moldes,

En un cazo, ponemos los 250 gr, de azúcar y los 125 de agua, a fuego suave unos 10 minutos.

Cuando este a punto de hebra, lo quitamos del fuego y dejamos que pierda calor, si nos mojamos los dedos, y tomamos un poco de almíbar, de una cuchara, y al separar los dedos nos hache un hilo, es cuando esta en su punto.

Batimos con unas varillas, las yemas y el huevo, sin hacer mucha espuma, pero que se integren bien, el huevo y las yemas.

Cuando el almíbar pierda un poco de calor, si dejamos caer con una cuchara veremos un hilo continuo.

Echamos el almíbar a los huevos, con un hilo fino sin parar de batir, para que las yemas no nos cuajen, aunque procuremos no hacer mucha espuma, un poco si nos va a salir, con una cuchara y por la superficie, con cuidado quitamos solo la espuma.

Colamos, para quitar alguna impureza de los huevos, lo echamos en una jarra, que nos va a servir de ayuda, para echar en los moldes, si son pequeños como yo los he hecho.

Llevamos al horno, que el agua ya estará caliente, y lo dejamos hasta que nos cuajen, como son pequeños en unos 25 minutos los tenemos, si lo pones en un molde grande te tardara, unos 10 minutos mas, si ves que toma mucho color por arriba, lo tapas con papel de aluminio, a mi no me hizo falta.

Cuando estén casi fríos, los metes en el nevera, tapados con papel de aluminio, tienen que estar muy fríos para desmoldarlos, estos como son pequeñitos, los he puesto en capsulas de papel.

Quedan suaves y deliciosos.

No tienen nada que ver con los comprados, merece la pena hacerlos en casa, si se tiene tiempo.

Espero que os gusten, en la mesa seguro que si tenéis invitados vais a triunfar, besos.

Adita

Muy sencillo, delicioso, jugoso, si lo haces te hacen la ola en tu casa, un brazo gitano que una vez lo pruebas no paras de hacerlo.

INGREDIENTES
8 huevos
300 gr de azúcar
Zumo de dos naranjas
Ralladura de dos naranjas
1 cucharada de harina
70 gr de mantequilla
Azúcar para espolvorear
Mantequilla para engrasar el molde
Papel vegetal

Este bizcocho es de origen Portugués, sale muy jugoso y rico

Rallamos la piel de las naranjas, solo la parte naranja, si lo hacemos con un rallador microplano, nos va a quedar muy bien finas.

Pincelamos con mantequilla liquida el molde, ponemos el papel vegetal encima, y también lo untamos con mantequilla.

En un bol ponemos los huevos y el azúcar.

La mantequilla la metemos unos segundos en el micro, y antes de que se quede líquida la sacamos, y removiendo con el calor que tiene de deshace toda.

Añadimos la ralladuras de naranjas, a los huevos y el azúcar.

Tenemos que batir con las varillas, sin formar mucha espuma a velocidad baja.

Echamos el zumo de las dos naranjas, y seguimos batiendo un poco.

Añadimos la cucharada colmada de harina tamizada, batimos unos segundos para que se integre bien sin grumos.

Le echamos la mantequilla líquida pero fría, y mezclamos, la masa queda totalmente líquida.

Este le he hecho en la bandeja del horno, lo metemos en el horno precalentado a 190º en unos 15 minutos se cuece, no hay que dejarle que se pase de cocción .
Espolvoreamos un paño limpio de cocina con bastante azúcar.
Cuando esté cocido, volcamos sobre el paño con azúcar, el bizcocho.
Nos ayudamos con el paño para enrollarlo, y dejamos dentro del paño con azúcar que se enfrié.

Es un bizcocho muy jugoso y rico, con un sabor muy intenso a naranja.

Puedes servirlo cortando como pastelitos, con nata y chocolate están de rechupete.

Es un brazo gitano, que si probáis hacerlo lo haréis mucho, por lo rico que esta, espero que os guste besos
Adita

Una receta de origen Griego, que es una maravilla, es sencilla esta jugosa y ricas, de las recetas que te dejan el plato limpio¡¡¡

INGREDIENTES
2 berenjenas grandes.
1 cebolla.
1 pierna de cordero lechal picada.
2 dientes de ajos.
300 gr de tomate rallado.
¾ l. de leche.
3 cucharadas de harina.
50 ml de aceite
1 pastilla de caldo concentrado de pollo.
1 yema de huevo.
50 ml de vino blanco
Un poco se orégano o cominos.
Nuez moscada
Pimienta
Queso tipo mozzarella y parmesano.
Aceite para freír

El carnicero nos deshuesa la pierna y nos la pica.
Picamos la cebolla, los dientes de ajos y los freímos con un poco de aceite, sin que tome mucho color, añadimos a la cebolla y ajos la carne picada, dejamos que se fría todo junto, a fuego moderado.
Lavamos las berenjenas, las cortamos finas sin que se rompan, con la mandolina para que nos queden todas las laminas iguales, las salamos y dejamos en un colador, para que suelten un poco el amargor.

Rallamos el tomate y con 2 cucharadas de aceite, lo ponemos a freír en una sartén aparte.

Cuando la carne este casi frita, le añadimos un poquito de orégano, o media cucharadita pequeña de cominos machacados y salamos un poco.
Yo le he puesto, un poco de cominos y pimienta.

Mientras se nos va cocinando la carne, vamos friendo las berenjenas, pero freírlas si harina, y con muy poco aceite, según las saquemos de la sartén las dejamos sobre papel de cocina.
Añadimos el vino a la carne y lo dejamos reducir, dando vueltas a la carne para que tome el sabor.
Añadimos el tomate frito y mezclamos bien dejando un par de minutos cociendo.

Preparamos la bechamel, con 50 ml de aceite y las 3 cucharadas de harina, echamos el aceite en una sartén, y cuando este caliente, le añadimos la harina, dejamos que tome un poco de color, para que pierda el crudo la harina, sin parar de remover.
Vamos añadiendo, la leche caliente poco a poco, y removiendo, para que no tenga grumos y nos quede lo mas fina posible, le añadimos las pastilla de caldo concentrado de pollo y un poco de nuez moscada.
Cuando esté bien cocida, retiramos del fuego y le añadimos la yema de huevo, removiendo muy rápido para que no cuaje, la yema le da mucha cremosidad, y suavidad a la bechamel.
Cubrimos con berenjenas fritas, el fondo del recipiente, que vamos a llevar al horno.
Ponemos una capa de la carne sobre las berenjenas, y cubrimos con otra capa de berenjenas, así hasta agotar la carne, cubrimos con una buena capa de bechamel, le ponemos el queso mozzarella rallado y le rallamos el parmesano encima, también con una buena capa.
Llevamos al horno precalentado, a 180º hasta que este bien fundido y dorado el queso, en unos 15 minutos aproximadamente se nos gratina.

Esta deliciosa, es parecido a la lasaña, pero en vez de placas de pasta, es la berenjena con la que hacemos las capas y el sabor del cordero, la hace que sea muy especial.